"ERA UN HOMBRE PASIONAL, UN HOMBRE QUE AMABA IMPOSIBLES."

miércoles, 4 de enero de 2012

Nunca fui un buen previsor.

Quiero decir, en algunos aspectos siempre lo fui pero nunca fui capaz de preveer algo a ciencia cierta. De ahí esa improvisación que siempre me acompañaba, aunque más bien, me caracterizaba. Lo mío era como una especie de caos organizado. Me refiero a que a pesar de esa cualidad que de la que carecia podía establecer un patrón y tener cierta idea de lo que sucedería pero casi siempre me equivocaba. De hecho, llegué a pensar que justo lo que preveía era lo que nunca se cumpliría. Por supuesto esto no lo sabia nadie. Todos, o por lo menos la mayoria de los que siempre me acompañaron, aplaudían la seguridad que tenía en mí mismo. Lo había logrado, pensaban que era verdad. Mentira. Lo mío era cuestión de apariencia. ¿Sabes de lo que te hablo, verdad? La vida trata de eso, ¿no? De hacer creer... aunque no sea verdad. Pero bueno, sinceramente siempre creí que algún día ocurriría algo. Algo que desvelase mi tapadera, mi verdadera naturaleza. Pero no fue así, no. Nadie me desenmascaró. ¡Qué hipócrita era! Lo hice yo mismo.




Marcos Pereira

No hay comentarios:

Publicar un comentario