En esta vida, la mayoría de la gente tiende a esperar a que le lleguen las
cosas buenas y, al hacerlo, las pierden. Por lo general, aquello que más deseas
no suele caerte encima; cae en algún sitio a tu alrededor, y tú tienes que
darte cuenta de que está ahí y tienes que levantarte e invertir el tiempo y el
esfuerzo necesarios para conseguirlo. Y no es que sea así porque el universo es
cruel. Las cosas funcionan así porque el universo es listo y sabe que los
humanos no apreciamos las cosas que nos caen del cielo sin esfuerzo.
La única intención es la de compartir pensamientos, opiniones y situaciones con la que todos vosotros os hayáis sentido alguna vez identificados. En definitiva: momentos.
"ERA UN HOMBRE PASIONAL, UN HOMBRE QUE AMABA IMPOSIBLES."
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Y es por eso que cuando lo perdemos, le echamos la culpa al destino, lo utilizamos como un mecanismo de defensa.
ResponderEliminarEs cierto.. Pero y entonces, si sabemos que fueron buenas porque nos permitios perder? Desconocemos el verdadero valor de las cosas, o es que no somos más que unos cobardes? Porque tampoco luchamos por lo que podría ser la felicidad? Siempre estamos esperando para coger el camino resuelto y dejamos de lado lo que requiera esfuerzo..
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